YPFB enfrentará mayores costos para importar combustibles tras autorización para usar dólares y criptomonedas

El Decreto Supremo 5348 autoriza a YPFB a adquirir dólares del Banco Unión y operar con criptomonedas para pagar por combustibles importados, pero expertos advierten que esta medida implicará mayores costos financieros debido a la diferencia entre el tipo de cambio oficial y el paralelo. La situación podría trasladarse al precio final del combustible, afectando al consumidor.

Foto: VISIÒN 360

El Decreto Supremo 5348, recientemente aprobado, autoriza a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) a adquirir divisas del Banco Unión y de sus corresponsales, así como criptomonedas para la compra de diésel, gasolina y otros insumos. Esta medida responde a la escasez de dólares en el país, lo que ha generado una crisis de liquidez y amenaza con afectar el abastecimiento de combustibles.

Sin embargo, expertos en finanzas alertan que YPFB tendrá que asumir costos más altos, ya que las operaciones con criptomonedas, como el USDT, se realizan a un tipo de cambio paralelo, que actualmente oscila entre 11 y 12 bolivianos por dólar. Esto podría incrementar el costo de la importación de combustibles, un gasto que, según analistas, podría trasladarse al precio final del combustible para los consumidores.

El analista Jaime Dunn explicó que, aunque YPFB podría conseguir dólares a través de plataformas de criptomonedas, la oferta es limitada y las transacciones tendrán costos adicionales debido al tipo de cambio del mercado paralelo. Además, el economista Gonzalo Chávez advirtió que la compra de divisas en el mercado negro podría hacer que los precios del dólar suban aún más, complicando aún más la situación económica.

Por otro lado, el ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, defendió la medida asegurando que permitirá a YPFB gestionar la importación de combustibles a través de nuevas plataformas de activos virtuales, aunque reconoció que la crisis de combustible no tiene una “solución mágica” y depende de otros factores, como la aprobación de créditos internacionales estancados en la Asamblea Legislativa.